Después de ver una conmovedora historia en las noticias sobre una familia de Dallas que lo perdió todo en un incendio el 20 de enero, un miembro anónimo de la comunidad se sintió motivado a ayudar. Se contactaron con la periodista de WFAA-TV Sydney Persing, quien cubrió la historia del incendio doméstico, para ver cómo podían hacer un donativo de muebles y artículos del hogar a la familia.

El 23 de enero, Persing se contactó con la Cruz Roja Americana para ver si podían ayudar. La Cruz Roja organizó rápidamente el proceso de donación y entregó los artículos a la vivienda temporal de la familia en la mañana del viernes 31 de enero.

"Enviamos nuestros pensamientos, oraciones y bendiciones a la familia afectada," dijo el donante no identificado. "Esperamos que estos artículos les ayuden en su recuperación."

Lucrecia Chilel y su familia estaban visitando a familiares cuando se enteraron de que un devastador incendio estaba arrasando su complejo de apartamentos en Dallas. Para cuando regresaron, su vivienda en Audelia Road había sido consumida por las llamas.

Los socorristas de la Cruz Roja llegaron al incendio para brindar asistencia inmediata a Chilel y otros habitantes. Afortunadamente, Chilel y su familia pudieron quedarse con familiares mientras procesaban la trágica pérdida y encontraban la manera de seguir adelante.

"Esta bondad realmente ha tocado nuestros corazones," dijo Chilel. "Estamos tan felices y agradecidos por los muebles, y que Dios bendiga al donante. No podemos agradecer a la Cruz Roja lo suficiente por su apoyo continuo, incluso después de que ya nos ayudaron una vez."

En tiempos de crisis, la Cruz Roja es un vínculo vital para las familias afectadas por desastres. Gracias a la amabilidad y empatía del donante, así como a la narrativa de Persing, la Cruz Roja pudo marcar la diferencia para Chilel y su familia al ayudarles a recuperarse de la tragedia.

"Normalmente, no veo el final de la fase de recuperación en una llamada del Equipo de Acción ante Desastres (DAT, por sus siglas en inglés)," dijo Nena Sopher, gerente del Programa de Desastres de la Cruz Roja, "pero hoy, pude ser parte de ello, y fue verdaderamente especial."