"Si tuviera que hablar de la guerra, no sería para mostrar la gloria de los ejércitos conquistadores, sino el mal y la miseria que dejan a su paso".
-Clara Barton, fundadora de la Cruz Roja Americana
Israel, Gaza, Ucrania, Sudán, Yemen y Colombia: estos son solo algunos de los más de 110 conflictos armados que se libran actualmente en todo el mundo, todos los cuales siguen provocando un sufrimiento indecible. El mundo está prestando una intensa atención a cómo estos conflictos se están librando, incluyendo el trato a civiles, la destrucción de instalaciones de salud y la prestación de ayuda humanitaria. A pesar de su caos y destrucción inherentes, la guerra no es un asunto sin ley. A medida que se desarrollan estos conflictos, la concienciación pública sobre cómo el derecho preserva la humanidad durante la guerra es posiblemente más importante que nunca. Ese corpus jurídico se conoce como Derecho Internacional Humanitario, a veces denominado Derecho de los conflictos armados o Derecho de la guerra. Estas leyes están destinadas a reducir el sufrimiento humano al ofrecer protecciones críticas a los inocentes.
La Cruz Roja Americana, como parte del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, participa en un esfuerzo mundial para informar al público sobre el Derecho Internacional Humanitario, una misión que tiene sus raíces en nuestros orígenes como movimiento humanitario. En 1859, en un campo de batalla del norte de Italia, Henry Dunant, un hombre de negocios suizo, fue testigo directo de la guerra tras la batalla de Solferino, en la que unos 300,000 soldados se enfrentaron en una cruenta batalla de 9 horas. Para su horror, miles de personas yacían heridas o moribundas en el campo de batalla con poca o ninguna atención. Después de ayudar a organizar la ayuda civil para los heridos, Dunant quedó conmocionado e inspirado por la experiencia. Dunant, decidido a utilizar los horrores de la guerra para impulsar el cambio, regresó a casa y escribió sobre sus experiencias. Su libro, Un recuerdo de Solferino, puso de relieve la carnicería de la que fue testigo, al tiempo que hizo un inspirador llamamiento al cambio. Su esfuerzo por sensibilizar a la opinión pública funcionó, lo que llevó a la fundación del Comité Internacional de la Cruz Roja y a la Primera Convención de Ginebra en la década de 1860.
A un océano de distancia, Clara Barton se enfrentó a un sufrimiento similar mientras trabajaba incansablemente para ayudar a los necesitados durante la Guerra Civil. Tras la guerra, pasó años educando a sus compatriotas sobre sus experiencias y la necesidad de abordar el sufrimiento en tiempos de guerra antes de fundar la Cruz Roja Americana en 1881. Poco después de su fundación, Clara Barton hizo de la ratificación estadounidense de la Primera Convención de Ginebra una de las primeras prioridades de la Cruz Roja Americana, lo que logró en 1882.
Hoy en día, la Cruz Roja Americana continúa con orgullo el legado de Henry Dunant y Clara Barton a través de su misión de educar al público sobre cómo la ley protege a la humanidad en tiempos de guerra. Esta misión se basa en los Convenios de Ginebra, así como en los Estatutos del Movimiento de la Cruz Roja, que exigen que la Cruz Roja Americana y otras sociedades nacionales de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja difundan públicamente los principios del Derecho Internacional Humanitario al público más amplio posible. Un público que está mejor informado de estas leyes es aquel que está facultado para pedir rotundamente que todas las partes en los conflictos armados respeten estas leyes, hablando con una voz poderosa capaz de efectuar cambios. De hecho, es este mismo conocimiento público el que ayuda a garantizar la eficacia duradera de estas leyes para reducir el sufrimiento y proteger a los inocentes en tiempos de guerra.
El Programa de Derecho Internacional Humanitario de la Cruz Roja Americana cuenta con más de 2,000 voluntarios dedicados y diversos que ayudan a difundir conocimientos y concienciar a sus amigos, compañeros, familiares y miembros de la comunidad. En conjunto, este esfuerzo de base ayudó a educar a más de 200,000 estadounidenses sobre estas leyes solo desde 2020. Desde conversaciones en pequeños grupos hasta conferencias, compromisos comunitarios y seminarios web nacionales, los voluntarios del DIH de la Cruz Roja Americana desempeñan un papel fundamental a la hora de ayudar a educar a sus conciudadanos estadounidenses.
La Cruz Roja Americana ofrece una variedad de capacitación educativa en Derecho Internacional Humanitario, que está diseñada para ser accesible para todos. Esta capacitación incluye educación sobre el Movimiento de la Cruz Roja, elementos fundamentales del Derecho Internacional Humanitario y temas más avanzados. Para estudiantes y jóvenes profesionales de entre 13 y 24 años, la Campaña de Acción Juvenil sobre Derecho Internacional Humanitario está diseñada para empoderar a los jóvenes a medida que avanzan y llevan a cabo sus propias campañas de difusión creativas y únicas. Juntos, estos agentes de cambio humanitario ayudan a garantizar que el Derecho Internacional Humanitario siga siendo una fuerza poderosa para preservar a la humanidad durante nuestras horas más oscuras.
Para obtener más información sobre el Derecho Internacional Humanitario y su papel vital en la protección de los inocentes durante los conflictos armados, así como oportunidades de voluntariado y eventos educativos, visite www.redcross.org/ihl (en inglés).
Acerca de la Cruz Roja Americana
La Cruz Roja Americana alberga, alimenta y ofrece apoyo emocional a las víctimas de desastres, suministra alrededor del 40 % de la sangre en el país, enseña habilidades que salvan vidas, distribuye ayuda humanitaria internacional y apoya a los miembros de las fuerzas armadas y sus familias. La Cruz Roja es una organización sin fines de lucro que depende de los voluntarios y de la generosidad del pueblo estadounidense para cumplir su misión. Para obtener más información, visite redcross.org o CruzRojaAmericana.org, o síganos en las redes sociales.