Voluntario Rafael Nieves entrega desayuno y cena a refugiados del Hotel Caribe en Ponce.
San Juan, Puerto Rico, 15 de mayo de 2020- Luego del temblor registrado en Ponce de magnitud de 5.4 a inicios de mayo de 2020, sobre 50 voluntarios de la Cruz Roja Americana Capítulo de Puerto Rico brindaron ayuda a las familias afectadas. A continuación, presentamos un informe de la labor brindada:
· 52 familias recibieron asistencia financiera para cubrir sus necesidades básicas
· 570 desayunos y cenas provistos a los refugiados en el Hotel Caribe
· 15 contactos de servicios de salud, salud mental y cuidado espiritual
“Cuando activamos una operación de respuesta, muchas divisiones entran en función. Realizamos la evaluación de daños para brindar asistencia financiera a las familias afectadas y culminamos con el apoyo para iniciar el proceso de recuperación”, expresó Lee Vanessa Feliciano, ejecutiva regional de la Cruz Roja Americana Capítulo de Puerto Rico. Además, debido a la pandemia del COVID-19, la Cruz Roja siguió las medidas de seguridad implementadas donde el 80% del personal realizó su labor de manera remota y el 20% fue presencial; cuyo personal cumplió con el distanciamiento social y la utilización de mascarillas, entre otro equipo de protección.
De igual forma, voluntarios de la Cruz Roja respondieron a fuegos e inundaciones en otras partes de la isla. En los meses de marzo y abril de 2020, la Cruz Roja atendió 45 fuegos residenciales. La ayuda que brinda la Cruz Roja Americana es posible gracias a los donativos recibidos por la comunidad. Todas las personas interesadas en apoyar la misión de la Cruz Roja en Puerto Rico, puede donar a través de ATH Móvil bajo la sección de Donar en “/CruzRojaPR”.
Para obtener más información sobre consejos de preparación ante desastres de la Cruz Roja Americana Capítulo de Puerto Rico, acceda cruzrojapr.net o siga las redes sociales de la Cruz Roja Americana Capítulo de Puerto Rico en Facebook, Twitter e Instagram bajo “Cruz Roja Puerto Rico”. La misión de la Cruz Roja es prevenir y aliviar el sufrimiento humano que causa una emergencia, movilizando el poder de los voluntarios y la generosidad de los donantes.