El huracán María ha sido el huracán más fuerte que ha impactado Puerto Rico en más de 80 años. Los efectos fueron catastróficos y ocasionó daños en el sistema de energía eléctrica, la red de las comunicaciones y el sistema de agua en todo Puerto Rico.
Desde el impacto del huracán María, muchas comunidades en Puerto Rico tomaron mucho tiempo para recuperarse y la Cruz Roja Americana estuvo presente para ser parte de los esfuerzos de recuperación a largo plazo en la isla. Realizamos proyectos en conjunto con otras organizaciones sin fines de lucro y agencias de gobierno en cuatro áreas claves de recuperación: energía, agua, salud y resiliencia comunitaria.
Con el fin de promover la resiliencia comunitaria, la Cruz Roja Americana instaló micro redes solares en escuelas que sirven como refugio en tiempos de emergencias. Las micro redes solares energizan áreas esenciales como el comedor, los salones utilizados como refugio y los baños cuando no cuentan con energía eléctrica. A su vez, cinco centros de salud cuentan con micro redes solares instaladas.
Sobre 160 escuelas cuentan con los paneles solares y baterías instaladas en su plantel escolar. Estos proyectos están localizados en 74 municipios de la isla, que incluyen Vieques y Culebra. Este esfuerzo se realizó con la coordinación y en colaboración con el Departamento de Educación y la Autoridad de Edificios Públicos.
Igualmente, la Cruz Roja Americana entregó sobre 500 generadores a personas que requieren el uso de energía para la utilización de un equipo médico. Esta cantidad es parte del total de 3,000 generadores entregados durante ambas fases: respuesta y recuperación.
El objetivo de este pilar fue asistir a hogares e instituciones vulnerables para obtener acceso a agua limpia y sostenible mediante la instalación de sistemas de purificación de agua unido a un sistema de energía solar. En conjunto con Water Mission, se instalaron micro redes solares en 22 comunidades que reciben agua a través de pozos comunitarios. Además, 175 líderes comunitarios fueron adiestrados en talleres sobre desarrollo financiero sostenible, operación de sistemas y conservación de agua.
Además, en colaboración con el Fideicomiso para Ciencia, Tecnología e Investigación de Puerto Rico, bajo el programa Agua Limpia, 14,400 filtros de agua fueron distribuidos en comunidades aisladas alrededor de la isla. El objetivo de este proyecto fue reducir el consumo de botellas de agua plásticas. Igualmente, se ofrecieron talleres sobre higiene y saneamiento del agua, transmisión de enfermedades por el agua y uso y mantenimiento del filtro.
Por último, la Cruz Roja proveyó tanques de almacenamiento de agua a 43 escuelas alrededor de la isla que sirven como refugios en tiempos de emergencias. Además, cinco tanques fueron entregados al Negociado de Manejo de Emergencias de Puerto Rico para ser utilizadas en momentos de emergencias.
Para aumentar la resiliencia de las comunidades, apoyamos 17 organizaciones, de las cuales 14 de ellas son centros de salud y clínicas del Centro de Salud Federal Cualificado, conocidos como los Centros 330, para prestar servicios de salud y salud mental en las diferentes comunidades. Más de 300 mil personas recibieron servicios de salud, salud mental y preparación ante desastres.
A través de las clínicas de salud, el Recinto de Ciencias Médicas y las organizaciones participantes, las personas recibieron servicios como: talleres sobre preparación en desastres, detección de traumas y referidos a clínicas en la identificación de padecimientos, evaluación de presión arterial y servicios dentales, entre otros. A su vez, más de 3,000 vacunaciones fueron realizadas como parte de este proyecto de recuperación.
Agradecemos el apoyo recibido por: Universidad de Puerto Rico Recinto de Ciencias Médicas, Community Health Foundation of PR, Corporación de Servicios Primarios de Hatillo, Morovis Community Health Center, Centro de Salud de Lares y Quebradillas, Migrant Health Center, Costa Salud, COSSMA, Centro de Servicios Primario de Patillas, Centro de Salud Familiar Dr. Julio Palmieri Ferri, Neomed Center, HPM, Concilio Integral de Loiza, Prymed, Corporación SANOS, MAVI, y Americares.
Por otro lado, con el fin de ayudar a que los centros de salud comunitarios cuenten con los recursos médicos necesarios para poder servir a las comunidades en tiempos de desastres, la Cruz Roja Americana y Direct Relief, unieron esfuerzos y distribuyeron 88 refrigeradores y cinco congeladores o “freezers” farmacéuticos alrededor de Puerto Rico.
Apoyo en campamentos de verano y programa de horario extendido a niños y jóvenes
Con el fin de crear niños, jóvenes y adultos más resilientes y mejores preparados para manejar futuros desastres, la Cruz Roja Americana se unió a Save the Children y el Instituto Nueva Escuela (INE).
A través de la colaboración con Save the Children y el Instituto de Nueva Escuela (INE), 7,089 estudiantes son más resilientes para cualquier tipo de emergencia. Además, 527 padres y maestros fueron atendidos con los servicios de salud y salud mental y adiestrados con talleres de preparación, entre otros. De igual forma, 5,054 maestros alrededor de Puerto Rico fueron adiestrados en Reanimación Cardiopulmonar y Primeros Auxilios.
Ayuda para los agricultores de Puerto Rico
La Cruz Roja brindó micro subvenciones a 450 agricultores que sufrieron pérdidas en sus fincas a raíz de los huracanes Irma y María y recibieron capacitación para ayudarlos en sus negocios. Además, 525 agricultores adicionales recibieron asistencia de recogido de fincas y donación de equipo agrícola. Estos logros se realizaron a través del programa creado “Recuperación Agrícola”, desarrollado en colaboración con el Fideicomiso para Ciencia, Tecnología e Investigación de Puerto Rico (PRSTRT).
Igualmente, apoyamos el programa de “De la Finca a la Escuela” junto a Agroinnova donde empoderamos a los niños y a todo el plantel escolar en la toma de decisiones sobre los alimentos que consumen y la importancia de la seguridad alimentaria; antes, durante y después de un desastre. Gracias a esta colaboración, 25 escuelas de alrededor de Puerto Rico cuentan con un sistema hidropónico y un huerto comunitario. Además, estudiantes fueron adiestrados en talleres de seguridad alimentaria.
María fue el huracán más inteso que impactó a Puerto Rico en más de 80 años; causó pérdidas devastadoras a los residentes y daños masivos a la infraestructura clave de toda la isla.
Por lo mismo, sobre 2,000 voluntarios y personal fueron activados para responder a la necesidad; la respuesta duró siete meses.